SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.4 número1Arqueología CulturalInfoxicación índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Articulo

Indicadores

    Links relacionados

    • No hay articulos citadosCitado por SciELO
    • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

    Bookmark

    Revista de Investigación Scientia

    versión On-line ISSN 2313-0229

    Rev Inv Sci v.4 n.1 Cochabamba oct. 2015

     

    ARTÍCULOS

     

    Rosario: Cuna de la Educación Indigenal en Bolivia

     

     

    Samuel Antonio Chávez
    Es licenciado en Teología por la Universidad Peruana Unión.
    Ha realizado estudios de Maestría en la misma universidad, trabajado el tema de la historia de la educación adventista en Bolivia.
    Actualmente se encuentra preparando su tesis doctoral en Teología.
    sach102@hotmail.com

     

     


    Resumen

    La educación indígena fue iniciada desde diversos ámbitos tanto gubernamentales como de grupos eclesiásticos preocupados por dotar de educación al indígena boliviano. Una de las experiencias más consistentes y que tuvo resultados a lo largo del tiempo, fue la educación adventista que inició sus actividades en la localidad de Rosario el año 1921, con una propuesta de educación integral, una década antes de la Escuela de Warisata.

    Palabras clave: Educación, Educación indigenal, Educación adventista.


     

     

    A inicios del siglo XX se realizaron diversos intentos para establecer escuelas indigenales en Bolivia por parte del gobierno. En 1910 se fundó la Escuela Normal Agrícola de Sopocachi en la ciudad de La Paz (Ribeiro 1987).1 Luego, la Escuela Normal Rural de Umala que pasó por serias dificultades debido a su mala ubicación: en Umajala no había agricultura, no había agua, ni había buenos terrenos de cultivo. La Escuela Normal de Colomi fue creada el 18 de febrero de 1916.3 Posteriormente se trasladó a la Finca de la Florida en las cercanías de Sacaba, con el nombre de Escuela Normal Rural "La Florida". Finalmente, se fundó la Escuela Rural de Puna en 1919.

    En cuanto a iniciativas privadas, diferentes denominaciones religiosas también emprendieron esta labor educativa. Una de las primeras experiencias fue The Bolivian India Mission en 1895. Esta organización se caracterizó por dos aspectos: 1) No reconocen ninguna organización centralizada, 2) No se establecen jerarquías. Luego, los bautistas, el 1 de febrero de 1899, durante la presidencia del general José M. Pando, abrieron la primera escuela protestante en Bolivia. Más adelante, en 1907, la iglesia Metodista inició programas de alfabetización en La Paz (Quispe, 2006). Finalmente, en 1903, se las denominadas Escuelas de Cristo comenzaron sus actividades. El nombre de Escuelas de Cristo fue adoptado por el padre José Antonio Zampa Renzi (Machaca, 2005).

    Otra de las organizaciones eclesiales que realizó una labor educativa fue la Iglesia Adventista del Séptimo Día (IASD). La IASD emprendió el trabajo educativo en la urbe de La Paz en 1912, en principio, sin mucho éxito. El año 1920 se produjo el encuentro de dos pioneros de la obra educativa: Francisco Tancara y Reid Shepard. Tancara fue a buscar un profesor para su comunidad con fines de alfabetización y Shepard buscaba una comunidad o un grupo de personas para impartir las enseñanzas de la Biblia. De esta manera, Tancara, junto a Mateo Urbina y Shepard partieron rumbo a Rosario el día jueves 2 de julio de 1920 (Rossi, 1983). Mateo Urbina vino del altiplano del Perú junto a Reid Shepard a Rosario, Bolivia. Este fue el inicio de una nueva etapa en la vida educativa del indígena de Rosario y en la historia de la IASD en Bolivia. La escuela de Rosario obtuvo su autorización de funcionamiento el 20 de agosto de 1921 (Pantoja 1921).

    El establecimiento del adventismo en el altiplano de La Paz ocurrió en circunstancias adversas y difíciles. El propio campesino se convirtió en un opositor acérrimo respecto a la presencia adventista en el altiplano de Rosario. Por su lado, la iglesia Católica promovía fiestas patronales, con el consiguiente uso del alcohol como forma de control de la vida del indígena. Según Arguedas, "El dominio del cura sobre el indígena es incontestable y fatal. Su voluntad se respeta y obedece sin restricción" (Arguedas, 1979, pág. 22).

    Sin embargo, entre los indígenas primó el deseo de aprender a leer y escribir. Una vez logrado su objetivo, se esforzaron por enseñar a sus coterráneos no sólo la lectura y la escritura sino el contenido del mensaje adventista. Hasta la mitad de 1923, Shepard y su esposa ya habían preparado a un grupo de jóvenes para enseñar religión, lectura, escritura y otros.

    La Escuela Adventista de Rosario trabajó en base a tres objetivos. Primero, convertir a los indígenas a la fe cristiana. Segundo, brindar una educación cristiana que los ayude a salir de su estado de ignorancia. Finalmente, enseñar a leer y escribir para defender sus tierras (Sirpa, 2003).

    El aporte educativo adventista en la vida del indígena de Rosario fue diverso. Se puede destacar: la coeducación, el nuevo estilo de vida, principios de salud, principios y valores bíblicos, el establecimiento de la escuela en su mismo hábitat, etc. Al respecto, Carlos Beltrán hace un reconocimiento significativo a la labor educativa de los adventistas al señalar:

    A pesar de una silenciosa batalla de incontables intrigas, el adventismo ha tenido éxito en transformar completamente la vida de miles de indios...asisten diariamente a la escuela donde no solamente aprenden a leer, escribir y calcular, sino también a vivir mejor (Beltrán, 1928, págs. 60, 61).

    La escuela de Rosario no fue un centro educativo primario común, se cree que fue una especie de Escuela Normal para indígenas. La escuela adventista formó a los estudiantes y al mismo tiempo a los primeros maestros en Rosario.

    La labor educativa adventista en el altiplano significó liberación, transformación y redención en los ámbitos social, religioso, mental y físico del indígena de Rosario. El aymara de Rosario al educarse en la Escuela Adventista encontró el camino para salir de su estado de opresión.

    Greenleaf, refiriéndose a la experiencia educativa en el altiplano peruano, señala que "las escuelas adventistas evidenciaron que una educación genuina e integral puede transformar una cultura" (Greenleaf, 2009, pág. 163). En el caso boliviano ocurrió tal transformación a favor del indígena del altiplano boliviano. La educación adventista en Rosario logró un impacto integral, transformador y relevante una década antes de Warisata.

     

    Bibliografía

    Arguedas, A. (1979). Pueblo Enfermo. La Paz: Isla.        [ Links ]

    Beltrán, C. (1928). Las escuelas adventistas. Educación Nueva, 60-61.        [ Links ]

    Greenleaf, F. (2009). Historia de la educación adventista. Una visión global. Buenos Aires: Casa Editoria Sudamericana.        [ Links ]

    Machaca, J. M. (2005). Escuelas de Cristo. Una obra educatia en al Misión Franciscana en Bolivia. Historia, 105.        [ Links ]

    Pantoja, Ó. R. (1921). Anuario de leyes y disposiciones supremas de 1921. La Paz: Litografías e imprentas unidas.        [ Links ]

    Pérez, E. (1992). Warisata. La escuela Ayllu. La Paz: Ceres.        [ Links ]

    Quispe, D. E. (2006). Historia de la Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia. La Paz: Ediciones Gráficas Virtual.        [ Links ]

    Rossi, G. (1983). Fray Zampa: su obra. La Paz: Don Bosco.            [ Links ]

    Sirpa, E. C. (2003). Historia de la Unidad Educativa Antonio Díaz Villamil del cantón Vichaya en sus bodas de diamante 1923 - 2003. La Paz: Editorial Catacora.        [ Links ]